Transformando la discapacidad en capacidad
07:00h Viernes, 28 de marzo de 2008
Este libro , titulado “Transformando la discapacidad en capacidad”, pretende proporcionar a las instituciones, entidades y profesionales implicados en la integración social y laboral de las personas con discapacidad, un análisis riguroso de las diversas actuaciones políticas.Transformando la discapacidad en capacidad: Políticas para fomentar la seguridad laboral y salarial de las personas con discapacidad. En este libro se proporciona un análisis sistemático de una amplia gama de programas relativos al mercado de trabajo y a la protección social cuyo objetivo fueron las personas con discapacidad. Al analizar la relación entre las políticas y los resultados en veinte países de la OCDE, se ofrece al lector una mejor comprensión de los dilemas que conlleva la política sobre discapacidad y de los elementos o conjuntos de medidas políticas que tienen éxito. En el informe se saca en conclusión que un nuevo enfoque político viable en materia de discapacidad debe estar más cerca de la filosofía de los programas de desempleo:
- Poniendo de relieve la activación.
- Fomentando una intervención precoz adaptada.
- Suprimiendo la falta de incentivos para el trabajo.
- Introduciendo una cultura de obligaciones mutuas.
- Implicando a los empresarios.
El objetivo principal de este informe es analizar las políticas que los países participantes han elaborado para lograr estos objetivos, y considerar la relación y la coherencia de las políticas en materia de discapacidad, tanto compensatorias como orientadas al empleo, de cada país. Se han determinado los conjuntos de medidas políticas que han tenido éxito al fomentar el empleo de las personas con discapacidad, al reducir la dependencia de las prestaciones por discapacidad y al asegurar unos ingresos dignos para este grupo de población.
En el informe se saca en conclusión que un nuevo enfoque político viable en materia de discapacidad debe estar más cerca de la filosofía de los programas de desempleo poniendo de relieve la activación, fomentando una intervención precoz adaptada, suprimiendo la falta de incentivos para el trabajo, introduciendo una cultura de obligaciones mutuas e implicando a los empresarios. Y se detecta que las políticas de muchos países ya incluyen algunos elementos que son componentes importantes de este nuevo enfoque.Un informe de esta riqueza no se habría podido preparar sin la ayuda activa de una multitud de funcionarios y colaboradores de los veinte países participantes. Los países contribuyeron proporcionando respuestas a un exigente cuestionario interdepartamental y datos administrativos sobre una amplia serie de programas de protección social y del mercado de trabajo relacionados con la discapacidad; participando en un encuentro de trabajo del proyecto provisional, y revisando los borradores de varios productos intermedios, así como este informe final. Algunos países también ayudaron facilitando el acceso a los datos estadísticos nacionales.
Varios países también contribuyeron con aportaciones financieras a este proyecto, que se ha financiado totalmente gracias a aportaciones voluntarias: Canadá, Australia, Holanda, Noruega, Suiza y Estados Unidos, así como la Comisión de las Comunidades Europeas.
El contenido del libro viaja por diferentes aspectos relacionados con la discapacidad, entre ellos: las diferentes políticas en relación a la discapacidad; identificación de la población en condiciones de ingresar al mercado laboral; la discacidad y los aspectos sociales, es decir, jubilación, obra social, enfermedad, etc; políticas de integración y anexos con diferentes conclusiones a las que ha llegado el autor en su trabajo de investigación.
Según la OIT (Organización Internacional del Trabajo), en la actualidad hay, en el mundo, unos 386 millones de personas con discapacidad en edad de trabajar. Son personas que tienen el potencial necesario para incorporarse a la fuerza de trabajo como empleados, trabajadores independientes o empresarios, y que desean hacerlo.
“Algunos empresarios han comenzado a descubrir este potencial. Muchos gobiernos han promulgado leyes y han formulado políticas y programas dirigidas a promover las posibilidades de ocupación de las personas con discapacidad que buscan trabajo, a mantener en el empleo a los trabajadores que quedan discapacitados durante su vida laboral y a facilitar la reincorporación a la vida activa de los trabajadores que han perdido su empleo como consecuencia de sus discapacidades”, aseguran desde la organización.
Una observación de las características actuales del mundo laboral establecen que “sin embargo, muchas de las personas con discapacidad que pueden y quieren trabajar están desempleadas (en una proporción que llega a superar el 80 % en algunos países). Con frecuencia, esto se debe a que los empleadores creen que las personas con discapacidad no están preparadas para el trabajo y no les dan la oportunidad de demostrar lo contrario. Otras razones son que, a menudo, las personas con discapacidad no han tenido el adecuado acceso a la educación y a la formación profesional, que los servicios de ayuda que requieren no están disponibles, que la legislación y las políticas no facilitan su incorporación al empleo y que los edificios y los medios de transporte no son accesibles para ellas”.
Des esta forma “estos y otros obstáculos están impidiendo que las personas con discapacidad encuentren un trabajo que les permita ganarse dignamente la vida, atender las necesidades de sus familias y contribuir a la economía nacional. Eso supone un gran despilfarro y una enorme pérdida, no sólo para las personas con discapacidad y sus familias, sino también para los empresarios y para el conjunto de la sociedad”, finaliza el escrito de la OIT.
Fuente: http://www.espaciologopedico.com