El Braille, código de lectoescritura táctil inventado en el siglo XIX por el profesor francés Louis Braille, es el sistema más utilizado por las personas ciegas y sordociegas de todo el planeta para acceder al mundo de la cultura, y por supuesto, para comunicarse entre ellas. Muchas son las ventajas de esta vieja herramienta, tales como su universalidad y relativa sencillez de uso cuando se domina, y también hay que destacar los inconvenientes, en especial su dificultad de aprendizaje a partir de ciertas edades y desde luego, el volumen que ocupa el papel escrito, pero es indudable que representa la mejor ayuda para la autonomía personal de los que carecen de vista, y que muy difícilmente podrá ser sustituida por otros inventos que aporten los modernos avances tecnológicos.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte el uso del Braille se ha ido reduciendo por diversos motivos que, aunque comprensibles, no pueden justificar tal abandono. En primer lugar, las nuevas tecnologías que posibilitan el acceso a la información mediante la voz, no crean una necesidad real de conocer el Braille para trabajar o estudiar y por tanto, son la causa de que muchas personas no lo aprendan. Tenemos después el hecho de que, con los avances que experimenta la ciencia médica, cada día son menos las personas ciegas totales y más las que, gracias a intervenciones quirúrgicas, consiguen tener un resto de visión que les permite leer y escribir sin necesidad de utilizar el tacto. Encontramos además otros obstáculos como la carencia de profesionales que aboguen por el uso de ese código y, más grave aún, la no obligatoriedad de enseñarlo en las instituciones de y para ciegos.
Con este breve documento se pretende, ante todo, reivindicar el uso del Braille entre las personas discapacitadas visuales, independientemente de su edad, nivel de estudios y grado de visión, ya que se trata de una herramienta básica de su vida diaria y cuyo desconocimiento, en muchos casos les convierte en analfabetos reales.
Es una reivindicación que se hace extensiva a todas aquellas personas e instituciones que tienen por objetivo atenderlos en cualquier aspecto educativo, laboral o social. En las líneas que siguen se dan a conocer de la forma más sencilla posible cómo se compone el alfabeto Braille, de qué forma puede comenzar su aprendizaje y algunos ejemplos prácticos de su utilización. Espero que este modesto trabajo contribuya a que propios y extraños miren el Braille como un fiel aliado de los ciegos y no como un instrumento anticuado o incluso obsoleto, calificativos que por su desconocimiento han llegado a atribuirle.
El sistema El Braille, al tacto, se percibe como pequeños relieves punzantes en positivo, practicados sobre la superficie en que se imprime, generalmente papel, pero puede tratarse de otro material laminado (plástico, cartulina, cinta adhesiva…) del grosor apropiado, que son unos 0,15 milímetros como mínimo. Los orificios, al ser de una profundidad y grosor muy específicos, no llegan a perforar el papel (siempre que éste no sea demasiado fino o de poca calidad) sino que generan unas pequeñas depresiones que son cómodas al tacto y muy fáciles de reconocer, por supuesto una vez se tiene aquél bien adiestrado.
Existe, sin embargo, la desventaja de que al oprimir los puntos con los dedos mientras se lee, como también durante el transporte de los escritos, éstos pueden perder su firmeza y borrarse a veces casi completamente.Cada carácter del código se compone de seis u ocho puntos, aunque aquí sólo mostrarñe el Braille de seis puntos conocido como “integral”, dejando de lado el de ocho puntos llamado “computerizado”, usado sólo en aplicaciones y dispositivos informáticos; los puntos de cada carácter están colocados en dos filas verticales contiguas de tres cada una, ligeramente separados pero todos a igual distancia del adyacente en ambas direcciones, y se disponen numerados del uno al seis, constituyendo lo que llamamos una celda: a la izquierda figuran el uno (arriba), el dos (en medio) y el tres (abajo), y a la derecha hay el cuatro (arriba), el cinco (en medio) y el seis (abajo).Una celda de Braille se separa de sus compañeras por la izquierda y por la derecha con una distancia equivalente a medio punto, y de las inferiores y superiores por el espacio correspondiente a un punto entero.
Lo primero que debe saber una persona interesada en aprender la lectura en Braille, antes que la formación de las letras y demás símbolos, es calibrar el espacio ocupado por cada carácter, cosa muy sencilla a la vista pero ciertamente laboriosa al tacto, a fin de que más adelante no mezcle las líneas y columnas que vaya a leer.
Las dimensiones reales del Braille son las adecuadas para que el dedo sea capaz de acceder a un único carácter simultáneamente. A título orientativo y para hacerse una idea más clara de estas medidas, en una hoja que tenga las dimensiones de un folio convencional (21×30 centímetros) caben unas 28 líneas de 32 celdillas cada una; si se dispone de los instrumentos adecuados, se puede escribir una página de Braille por las dos caras, lo que se denomina “interpunto”, pues las distancias a que me refería al principio del párrafo anterior fueron ideadas con tal objetivo.
La composición de un carácter Braille se efectúa combinando la aparición o no de cada uno de los seis puntos disponibles en él, lográndose por tanto un máximo de 64 símbolos posibles, número muy reducido dada la gran cantidad de caracteres que posee la escritura convencional, hecho que ocasiona el que algunos precisen más de una celda para ser representados o equivalgan a un mismo símbolo Braille según el contexto en que se lean.
¿Y cómo se escribe?
En primer lugar se necesita un utensilio adecuado, que puede ser una regleta de plástico o metal ranurada y cuadriculada al efecto, o una máquina mecánica o eléctrica de escritura en Braille; después, para los instrumentos no manuales, basta con atenerse a sus pautas de funcionamiento (introducción del papel, tecleo o impresión de los datos, etc.), y en las regletas debe colocarse la hoja al revés de como se ha de leer y, por tanto, escribir de derecha a izquierda invirtiendo la posición de los puntos que se irán practicando uno a uno con la ayuda de un punzón.
2 Comentarios en “¿Qué desconoces del Sistema Braille?”
nesesito saber cual es el braile que ocupa los 6 puntitos plissss
Buenas tardes Mi nombre es jorge y me gustaria conocer el idioma braille por el motivo para poder trasmitir y ayudar ademas personas y conocen algun lugar aqui en Guadalajara Jalisco se le agradese mucho